¡Adéntrate en el corazón helado de Siberia, donde la brutalidad y el frío son moneda corriente! Descubre la vida en una región que desafía incluso a los más valientes, con temperaturas que pueden hundirse hasta niveles extremos. Aquí, en Oymyakon, el pueblo más frío del planeta, el termómetro puede caer por debajo de los -50°C, desafiando todo lo que creías saber sobre el invierno.