El odio de los grupos islamistas hacia Estados Unidos se traduce en los atentados del 11 de septiembre. Una nueva justificación para una campaña bélica contra Irak, a la que ahora también se suman algunos países europeos.
El gobierno estadounidense acusa a Sadam Huseín de haber apoyado a los terroristas de Al Qaeda en los atentados del 11-S. Pero es evidente que hay intereses económicos detrás. Con su "guerra contra el terrorismo", Estados Unidos quiere legitimar la derrota final del régimen de Sadam Huseín.
El derrocamiento del dictador iraquí se ...
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