En La Casona, la antigua residencia presidencial de Venezuela, quedó formalmente establecida la retoma de los diálogos de paz entre el gobierno de Colombia y la guerrilla de Ejército de Liberación Nacional, el ELN.
Se trata de un diálogo complejo y trabado, que comenzó hace diez años, y se congeló durante el gobierno de Iván Duque. Los jefes guerrilleros encabezados por el comandante Antonio García y el Estado colombiano representado por el nuevo comisionado de paz, Iván Danilo Rueda, se mostraron en Caracas junto a los garantes de Cuba, Venezuela y Noruega.
La “paz total”, objetivo central del presidente Petro en Colombia parece avanzar rápido y a paso firme, de la mano de una nueva voluntad política aunque todo el mundo sabe que no faltan las acechanzas.
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