¡Amigos! Mi alocada semana en Burning Man continúa. Estoy aquí investigando su supuesta “buena fe”. Dicen que aquí todo es súper ecológico, que se cuida al máximo la naturaleza y que ni un papelito puede terminar fuera de la basura. ¿Será cierto? ¿O será que a nadie le importa y la gente viene solo por los raves, las fiestas, los DJs y el desenfreno total? Además, quiero saber si el dinero ofrece algún privilegio en este desierto y qué ocurre aquí en cuanto al comercio. ¡Vamos a descubrirlo!