Internet está invadiendo todos los aspectos de tu vida. Ya no se limita a tu ordenador o a tu teléfono, sino que Internet está ahora en los cubos de basura, en los frigoríficos y en las infraestructuras de nuestras ciudades. El futuro será una pesadilla de vigilancia o una eco-utopía, el resultado lo determinan las empresas de Silicon Valley y Shenzhen.