El infierno nuclear de Hiroshima no terminó aquel 6 de agosto de 1945. Para muchas familias fue el inicio de un calvario. Un adolescente fue separado de su padre a quien, posteriormente, reencontraría. Su hija narra la trágica historia familiar.
El 6 de agosto de 1945, a las 8:15 de la mañana, la aviación de Estados Unidos lanza la primera bomba atómica de la historia. Mueren en el acto 70.000 civiles japoneses. Un número similar fallece los meses posteriores a consecuencia de las heridas sufridas. La enorme onda expansiva destruyó el 80% del centro de la ciudad. A solo 1.200 metros, Shinji Mikamo y su padre, Fukuichi, sobrevivieron milagrosamente a la catástrofe. Shinji fue rescatado con graves lesiones y quemaduras por su padre, también herido. Separados, el adolescente Shinji tuvo que luchar solo por sobrevivir.
El documental narra la historia de Shinji: su lucha por la supervivencia y el perdón. Conecta material fílmico poco común con representaciones conmovedoras logrando así un impactante relato sobre los horrores de una guerra nuclear. El documental fue producido por la hija de Shinji, Akiko, quien lanza un mensaje de paz a todo el mundo para que "nadie tenga que volver a sufrir una guerra nuclear”.