¿Cómo los movimientos sociales han logrado empujar a los líderes mundiales a condenar el genocidio en Gaza?

El 31 de julio de 2024, el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica de Irán informó del martirio de Ismail Haniya, líder del movimiento palestino HAMAS, y uno de sus guardaespaldas, en un ataque perpetrado por el régimen de Israel contra su residencia en Teherán.

El presidente de Irán, Masud Pezeshkian, ha dicho que el país está firme en la defensa de su territorio y en el apoyo al derecho del pueblo palestino a la autodeterminación, mientras el Ministerio de Asuntos Exteriores persa señala a Ismail Haniya como “el compañero fiel del mártir teniente general Qasem Soleimani”, puntualizando que su martirio fue un crimen atroz y una violación flagrante de los principios del derecho internacional, la soberanía nacional y la integridad territorial de la República Islámica de Irán.

El balance de los palestinos asesinados en ataques israelíes en la Franja de Gaza, llega a 60 933. El Ministerio palestino de Salud, por su parte, ha informado que el número de fallecidos por lo que las agencias humanitarias internacionales consideran una posible hambruna en curso asciende a 175, incluidos 93 niños, desde el inicio de la guerra.

Conciencias que han sensibilizado a los pueblos del mundo entero, este fin de semana, se registraron manifestaciones propalestinas, en Cisjordania ocupada, Turquía y Países Bajos, donde se exigió poner fin a la ocupación, detener la guerra en Gaza, permitir la entrada inmediata de ayuda humanitaria y de socorro, y tomar medidas con herramientas legales claras para procesar y exigir responsabilidades a Israel por lo que está haciendo al pueblo palestino.

En esta edición de Detrás de la Razón analizamos, el primer aniversario del asesinado del Líder de HAMAS, Ismail Haniya mientras visitaba Teherán y cómo se mantiene la resistencia palestina.

Por Osvaldo Canales

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