La bisutería está en auge y es barata. Pero ese brillo tiene su lado oscuro. Se fabrica en condiciones precarias y los clientes arriesgan su salud debido a sustancias tóxicas. El reportaje investiga de dónde proviene la bisutería y cómo se produce.

Las plataformas de comercio electrónico chinas Shein y Temu abastecen a todo el mundo con bisutería estilosa, como collares y pendientes brillantes o pulseras doradas. Sólo en Shein se añaden cada día unos 6.000 nuevos modelos. Pero en las fábricas de producción, la realidad está lejos de ser glamurosa. Una semana laboral de 60 horas no es una excepción. En China hay una expresión para esto: "9-9-6”, es decir, trabajar de nueve de la mañana a nueve de la noche seis días a la semana. Los obreros de las fábricas de bisutería pagan con su trabajo el bajo precio de los productos, y el cliente tal vez con su salud. En los análisis de laboratorio se encuentran a menudo metales pesados tóxicos y productos químicos. En este documental, expertos nos explican lo que todo eso puede significar.

Dos empresas familiares alemanas logran una alta facturación en el mercado europeo: Bijou Brigitte y el Grupo Beeline. En sus descripciones de los productos, los mayoristas informan de manera bastante general sobre las cadenas de suministro y hacen promesas de sostenibilidad. Para los clientes, es casi imposible conocer el origen exacto y las condiciones de producción de las piezas. El reportaje sigue la pista de estos objetos de moda hasta China.