En 2016 se cumplieron treinta años desde el peor accidente nuclear nuclear de la historia en Chernóbil, Ucrania. Matando a miles y amenazando la vida de millones, Chernóbil sigue siendo uno de los lugares más peligrosos del planeta. La cubierta que cubre el viejo reactor ha ido deteriorándose lentamente durante años, por lo que ahora es tiempo para un nuevo proyecto de construcción masivo que la refuerce, con un coste de más de 2.000 millones de euros. Se está construyendo un gigantesco sarcófago para cubrir la planta nuclear dañada. En otros lugares de Europa, los residuos de los primeros años de la energía nuclear siguen siendo un problema en todo el mundo.