La frontera más al sur de Europa está en Melilla, una pequeña región norteafricana que pertenece a España. Esta comunidad subsiste del comercio de mercancía de segunda mano, que llegan a los países africanos como "equipaje de mano" libre de impuestos sobre los hombros de las porteadoras y porteadores marroquíes. "¡Esto no es trabajo, esto es la guerra!" Nora El Koukhou, una de estas "mulas humanas" que, cada día, carga bultos que llegan a pesar más de 60 kilos, a través de la frontera. Mientras que transporten los artículos con su cuerpo, permanecen libres de impuestos y aranceles. Es un negocio muy duro que se realiza en condiciones inhumanas, pero representa uno de los sectores más importantes para la economía de Melilla.
Las personas que cargan los bultos, son mayoritariamente mujeres, per cada vez hay más hombres, jóvenes, ancianos y incluso enfermos, que hacen este trabajo. El problema es que las porteadoras y porteadores obtienen unos beneficios ridículos por este trabajo.
Cuando los cruces fronterizos cierran, el tráfico de mercancías se para y el ambiente se llena de tensión y frustración.
Mientras Nora El Koukhou lucha desesperadamente por sobrevivir, el comerciante Mohammed Abdelkader se queda sin poder cruzar la frontera y pierde mucho tiempo y dinero.
Este documental nos muestra cómo los políticos, y los comerciantes se llenan los bolsillos con este duro trabajo que sufren los más humildes; todo esto en territorio Europeo.
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