Con la ayuda de la tecnología moderna, desvele el comportamiento desconocido de algunas especies poco comunes de tiburones: los tiburones limón y sus homólogos de arrecife de puntas blancas. Nuestro viaje cinematográfico comienza en las Bahamas. Para ser más precisos: en las aguas azul turquesa del Banco de Gran Bahama, en un lugar exactamente fijo.
En primavera llegan aquí entre 70 y 80 tiburones limón preñados. Esta enorme población de tiburones fue descubierta por primera vez hace sólo unos años por el investigador de tiburones, el profesor Sam Gruber. Muchas de las hembras están cansadas y descansan en el lecho marino. En medio de este grupo nadan tiburones tigre preñados. Sin ningún tipo de protección, nuestros camarógrafos graban sus secuencias, rodeados de tiburones y logran captar imágenes hasta ahora inéditas.
Continuamos nuestro viaje a Gainesville, Florida, para reunirnos con Gordon Hubbell, el mayor experto en dentaduras de tiburón, que posee la mayor colección de dentaduras de tiburón del mundo. Lo sabe todo sobre la historia evolutiva de los tiburones limón, además de los de arrecife de punta blanca de la isla del Coco, en Costa Rica. Aquí encontramos grandes bancos de peces, un número sin precedentes de rayas y tiburones martillo. Sin embargo, son los tiburones punta blanca los que causan mayor impresión. Su actuación comienza bien entrada la noche. Merodeadores, patrullan en grandes grupos por los arrecifes y cazan todo lo que se mueve. Escamas y presas muertas flotan sobre el arrecife, un cambio de dieta que las omnipresentes barracudas agradecen.
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