Los críticos afirman que son "campos de tortura", que llevan la disciplina al extremo. Sin embargo, para que sus hijos eviten el círculo vicioso de la delincuencia y la cárcel, muchos padres desesperados optan por este método cuasi militar.
Pasamos cinco meses en la Discovery Challenge Academy, que acoge cada año a 125 adolescentes conflictivos. Las dos primeras semanas son las más duras. Todo está estrictamente pautado: 10 minutos para comer, 2 minutos para ducharse, 10 segundos para ponerse los calcetines. Hay 50 camas por dormitorio e incluso hay que pedir permiso para ir al baño. El teléfono, la televisión y Internet están prohibidos, como también ver a la familia durante los tres primeros meses.
¿Quiénes son estos jóvenes? ¿Cómo han llegado hasta aquí? ¿Qué pruebas y retos tendrán que superar?