Los africanos saben perfectamente qué ha estado lastrando su desarrollo: la descolonización incompleta. Los europeos nunca se fueron del todo del continente, manteniendo sus injerencias de manera más o menos sutil. En los últimos años Rusia ha estrechado lazos políticos, comerciales y de seguridad con diferentes países africanos, generando un clima de confianza con sus Gobiernos. Esto preocupa mucho a Occidente que ve su dominio amenazado. ¿Logrará África por fin deshacerse del yugo?