Rembrandt Harmenszoon van Rijn no era judío ni tenía raíces judías en su genealogía. Sin embargo, se convirtió en uno de los pintores que más y mejor reflejó a las comunidades judías del Amsterdam del S.XVII. Como vecino del barrio judío de la ciudad no solo se dedicó al retrato sino que también utilizó motivos religiosos del judaísmo para varias de sus obras e incluso recibió asesoramiento de algún rabino con el que guardaba una estrecha relación. De hecho varias de sus pinturas representan detalles que solo un gran conocedor de los textos judíos puede reflejar.
El fascinante vínculo de Rembrandt con el mundo judío ha sido objeto para Steven Nadler, profesor de Filosofía y Humanidades en la Universidad de Wisconsin-Madison, quien en su obra "Rembrandt´s Jews" analiza cómo se convirtió en el pintor de cabecera para los judíos de la época y cómo desarrolló y cultivó su interés por el judaísmo. Con él conversamos en esta actividad.
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